¿Cuál es el sueño que interesa al psicoanálisis? ¿El sueño soñado? ¿El sueño recordado? ¿El sueño relatado?
¿Es la interpretación de los sueños el único procedimiento de que se vale el psicoanalista para conocer las represiones del paciente y la génesis de la neurosis?
¿El estudio de los sueños sigue siendo el lugar privilegiado para explorar las paradojas que vivimos los seres humanos?
Sigmund Freud fue armando su teoría de los sueños a partir de su experiencia clínica, gracias a ella aprendió a desarticularlos en sus significados inconscientes (como hiciera con los síntomas neuróticos de sus pacientes) casi desde un principio. Luego usó el análisis de sus propios sueños como procedimiento básico de su autoanálisis. Trató así de hacer entendible lo que en principio se presentaba como inentendible. Lo que Freud pretendió demostrar es que el sueño no está desprovisto de sentido y que es posible, a través de un análisis riguroso, llegar a conocer su significado. Usó con ellos entonces el mismo método usado para los síntomas, método que fue puliendo en forma paulatina, descifrando el sentido de los sueños (lo que hasta él era “sin sentido”) a partir de las asociaciones libres y desde el contenido latente surgido de ellas. De esta manera él mismo comparó su tarea con la realizada en su momento por Champollion, descubridor del significado de los jeroglíficos egipcios.
Fue hasta que Freud osó filtrarse por los complejos y a menudo escabrosos territorios del inconsciente, cuando los sueños empezaron a revelar su verdadero significado. Y es debido a su gran influencia que hemos podido deslizarnos en el espinoso laberinto de nuestro inconsciente, permitiéndonos con ello obtener una visión distinta y más fértil de nosotros mismos. Freud atribuyó una gran importancia a La interpretación de los sueños —a la que consideró su obra capital— que, por un lado, representa parte de su autoanálisis y constituye, por otro, el camino más eficaz y directo de acceso al inconsciente.
No nos es dado conocer el inconsciente sino a través de sus formaciones, y es ahí en donde el sueño ocupa un lugar privilegiado, ya que constituye “la vía regia de acceso al inconsciente”. El descubrimiento que hiciera Freud del significado de los sueños tuvo —y sigue teniendo— una inmensa trascendencia en la historia cultural de la humanidad.
Objetivos
Destacar el uso clínico de los sueños y sus aplicaciones en otros ámbitos del saber humano, a partir de la dimensión científica que Freud les confiriera en La interpretación de los sueños.
Acercar al público no especializado —pero con nociones básicas de lo que es el psicoanálisis— al universo científico de los fenómenos oníricos.
Aclarar conceptos y aprender a interpretar los propios sueños y los de los pacientes en tratamiento psicoanalítico.